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¿Conoces la Técnica simple banda en la reconstrucción total del LCA?


Aware's Editorial Team

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Nos referimos a la reconstrucción total cuando ambos fascículos del LCA se encuentran rotos, con los consiguientes criterios de inestabilidad puestos de manifiesto clínicamente.

 

La técnica estándar y más longeva para el caso que nos confiere es la simple banda o monobanda, en la que se realiza una única tunelización tanto en fémur como en tibia, y que según la experiencia del autor, realiza con plastias autólogas de isquiotibiales (semitendinoso y recto interno), aunque se puede realizar mediante plastias de tendón rotuliano, o aloinjertos. Existen diferentes posibilidades de reconstrucción, la anatómica antero-medial, la transtibial y las lesiones asociadas

Vamos ahora a desarrollar la técnica.

 

Portales artroscópicos

La técnica se realiza mediante los clásicos portales artroscópicos anterolateral, anteromedial y posibilidad según algunos autores, anteromedial accesorio.

 

Protales endoscopicos

Imagen de los portales artroscópicos habituales, usados para la reconstrucción del LCA.

 

Si bien el anteromedial puede realizarse en base al concepto “anatómico” actual, en una posición mas baja del estándar localizado, ligeramente superior al menisco interno, de esta forma, se obtiene un mayor y mejor ángulo de ataque al fémur al realizarse el fresado posterior desde este portal y no desde el túnel tibial como clásicamente se realizaba en el denominado abordaje “transtibial”, lo que consistía en introducir la guía a través del orificio ya realizado en la tibia.

El primer tiempo de valoración de lesiones asociadas, resulta obligatorio para así reparar las posibles patologías meniscales o condrales.

 

Localización de puntos de entrada de túneles (tibial y femoral). Referencias

Las referencias vendrán determinadas por los restos de ligamento en la inserción tanto femoral como tibial, especialmente en los caso agudos. En aquellos casos sin restos se debe mantener las referencias como se describe a continuación. La preferencia del autor es comenzar con el túnel femoral en primer lugar para de esta manera, evitar la extravasación de fluidos (con sus posibles complicaciones) y en un segundo tiempo el túnel tibial.

Realizar la limpieza de los restos en la cara medial del cóndilo femoral externo, marcando el origen de estos restos de ligamento, inmediatamente posterior a la cresta intercondilar lateral (“cresta del residente”) y con la cresta bifurcada, perpendicular y posterior a la cresta intercondilar lateral. Con la rodilla flexionada 100-110º introducir la aguja Kirschner a través del portal AM y se sitúa sobre el centro de la huella, que previamente se ha marcado con el vaporizador.

Con una orientación de la aguja hacia lateral y proximal, proceder al brocado con la aguja-guía, desde dentro hacia afuera, hasta perforar la cortical lateral del cóndilo femoral externo.

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Cirugía de revisión del LCA

y plastia extrarticular lateral

Cirugía de revisión de Ligamento Cruzado Anterior (LCA) y plastia extrarticular lateral

(Pulsa la foto para acceder)

“Cuando hablamos de las cirugías ligamentosas, este tema es muy frecuente, y puede llegar a tener una incidencia de hasta 10% de los casos y afecta mucho la calidad de vida del paciente. Es por esto que es importante estar preparado para que como especialista puedas tener las herramientas que te ayuden a mejorar la calidad de vida de tu paciente.”

La posición de la aguja debe ser lo más fiel posible a la localización del centro de la huella, teniendo en cuenta que se debe respetar un grosor total de túnel de al menos 2 mm desde el túnel hasta la cortical femoral posterior, por lo que si se va a utilizar una ligamentoplastia tetrafascicular habitual de 8 mm, la distancia desde la borde posterior al centro del punto seleccionado como de  la entrada intraarticular del túnel deberá ser al menos de 6 mms.

 

 

Una vez posicionada la aguja-guía se realiza el brocado sucesivo o progresivo de milímetro en milímetro sobre la misma según el grosor de la plastia, con túnel ciego para fijación mediante dispositivo cortical de suspensión.

 

 

Realización del túnel tibial

Una vez realizado el túnel femoral se procede a realizar el túnel tibial, para el brocado del túnel tibial se utiliza el portal anterolateral como portal de visión y el anteromedial como portal de trabajo, y en primer lugar se debe visualizar y valorar la huella tibial del LCA. En los casos en los que el muñón proximal sea evidente, esta localización será más sencilla.

Las referencias anatómicas, principalmente las espinas tibiales y el cuerno anterior del menisco interno también ayudarán en su localización. Con un vaporizador, se marca la inserción del LCA en su huella anatómica.

 

 

Se usa guía de brocado fuera-dentro, situando el extremo de la misma sobre el centro de la huella anatómica tibial previamente marcada, en una disposición referenciada posteriormente al cuerno anterior del menisco externo.

Evitar posiciones muy anteriores, que pudieran producir un efecto de atrapamiento de la plastia dentro del surco intercondíleo (conocido como efecto cíclope), y ajustando dicha guía con una angulación de 50º en el plano sagital y 30º en el coronal se procede al del túnel tibial de forma progresiva y según diámetro de la plastia obtenida de la suma de ambos tendones isquiotibiales.

 

 

Pase de la plastia y sistemas de fijación

Con la rodilla en posición de flexión y una vez colocado el sistema de suspensión cortical habitual en el bucle de la plastia proceder a la tracción desde proximal, para una vez superada la cortical externa efectuar el bloqueo del sistema de suspensión, lo que se comprueba mediante la tracción desde distal y valorando la no movilización del la plastia.

Posteriormente se fija la plastia a nivel tibial con tornillo interferencial y/o grapa.

 

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